2 de enero de 2012, Memphis Tennessee. Sí, 2 de enero. Era el día del fin del mundo, o eso al menos anunciaban las 6 promos con el niño y la niña. Muchas teorías. Regreso de los McMahon, fin de la era PG... Pero no. Tras 6 semanas de espera, las luces del FedExForum Arena se apagaban y en medio del titantron aparecía Chris Jericho. The Lion Heart, The Best In The World, el primer Undisputed Champion estaba de regreso. Lo hacía con una chaqueta con luces lo menos extraña. Y tras 10 minutos en la Arena saludando al público se marchaba sin decir palabra alguna. Algunos lo catalogaban de genialidad, otros del peor regreso que han visto. A mi me interesaba. Era algo nuevo, nunca visto.
Tras semanas sin soltar una sola palabra y abandonar un combate en RAW sin motivo, Chris llegaría a la Rumble como favorito. Los focos apuntaban a él, los fuegos artificiales estaban listos. Chris entraba con el número 29 y tras eliminar a Otunga y Orton, se quedaba solo en el ring con Sheamus. Todos o casi todos en mi opinión, esperábamos la victoria del canadiense que explicara todo aquello de The End Of The World. No fue así. Sheamus se llevaría la Rumble.
Semanas después atacaba al campeón CM Punk, preparando el combate para WrestleMania. En el último PPV antes de The Big One, Jericho participaría en la Elimination Chamber de RAW pero sería eliminado tras ser empujado por Punk fuera de la Chamber sin poder recuperarse.
Al día siguiente en RAW, Jericho ganaría un Battle Royal y se convertiría en el aspirante al título en WrestleMania. Aquí empezaba el feudo entre Punk y él mismo. Jericho atacaba a Punk y arremetía contra su familia señalando a su padre de alcohólico y a su hermana de drogadicta para caldear el ambiente antes del 1 de abril. Chris lució bien en una gran lucha con una gran historia contada pero volvía a perder. Aún seguíamos sin entender eso de The End Of The World.
Jericho seguía atacando a Punk tras WrestleMania. Botellazos, intentos de que bebiera e insultos a la familia del de Chicago. Jericho se plantaba en el Allstate Arena de Chicago delante del público de Punk. Confiado. El Codebraker con la silla incluida no fue suficiente. Punk retenía y Jericho volvía a perder de una manera un poco humillante a mi parecer.
The End Of The World. Eso es lo que nos prometía Jericho, uno de los mejores de la historia del negocio a mi gusto, pero lo que solo nos ha traído han sido en realidad derrotas. Es cierto que ha lucido bien en sus cuatro PPV pero mis preguntas son, ¿a dónde lleva el retorno de Jericho si en verano se vuelve a marchar con Fozzy? ¿Y lo de The End Of The World? ¿Dónde queda el status de Jericho tras estos últimos meses? Sean felices y vean mucho wrestling.
Tras semanas sin soltar una sola palabra y abandonar un combate en RAW sin motivo, Chris llegaría a la Rumble como favorito. Los focos apuntaban a él, los fuegos artificiales estaban listos. Chris entraba con el número 29 y tras eliminar a Otunga y Orton, se quedaba solo en el ring con Sheamus. Todos o casi todos en mi opinión, esperábamos la victoria del canadiense que explicara todo aquello de The End Of The World. No fue así. Sheamus se llevaría la Rumble.
Semanas después atacaba al campeón CM Punk, preparando el combate para WrestleMania. En el último PPV antes de The Big One, Jericho participaría en la Elimination Chamber de RAW pero sería eliminado tras ser empujado por Punk fuera de la Chamber sin poder recuperarse.
Al día siguiente en RAW, Jericho ganaría un Battle Royal y se convertiría en el aspirante al título en WrestleMania. Aquí empezaba el feudo entre Punk y él mismo. Jericho atacaba a Punk y arremetía contra su familia señalando a su padre de alcohólico y a su hermana de drogadicta para caldear el ambiente antes del 1 de abril. Chris lució bien en una gran lucha con una gran historia contada pero volvía a perder. Aún seguíamos sin entender eso de The End Of The World.
Jericho seguía atacando a Punk tras WrestleMania. Botellazos, intentos de que bebiera e insultos a la familia del de Chicago. Jericho se plantaba en el Allstate Arena de Chicago delante del público de Punk. Confiado. El Codebraker con la silla incluida no fue suficiente. Punk retenía y Jericho volvía a perder de una manera un poco humillante a mi parecer.
The End Of The World. Eso es lo que nos prometía Jericho, uno de los mejores de la historia del negocio a mi gusto, pero lo que solo nos ha traído han sido en realidad derrotas. Es cierto que ha lucido bien en sus cuatro PPV pero mis preguntas son, ¿a dónde lleva el retorno de Jericho si en verano se vuelve a marchar con Fozzy? ¿Y lo de The End Of The World? ¿Dónde queda el status de Jericho tras estos últimos meses? Sean felices y vean mucho wrestling.
Iván Santos para Tododelwrestling.blogspot.mx
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